Después de un año de trabajos en la casa de la Fundación Alicia Vega, el sábado 27 de julio se realizó la inauguración que abre una nueva etapa de colaboración y creación para la Fundación. Junto a amigas y amigos cercanos, y colaboradores de Alicia, celebramos la apertura de puertas y la instalación de la exposición permanente que permitirá que las nuevas generaciones conozcan, interactúen y aprendan de la mano de la metodología de Alicia Vega.
La casa se ubica en se encuentra ubicada en la Población León XIII, en el Barrio Bellavista. Este sector fue declarado Zona Típica que destaca por sus casas, originalmente viviendas sociales obreras construidas a fines de 1800. Hoy, se rodea de otros espacios culturales y educacionales que dan vida al sector, como teatros, centros culturales, universidades y lugares históricos de Santiago.
Esta construcción tiene más de un siglo y se realizaron trabajos de limpieza y pintura, conservando su fachada y la estructura interior. De esta manera, se habilitó el espacio para la exposición permanente, sin interferir con esta histórica infraestructura para el barrio.
La ubicación de la casa está estratégicamente en un sector céntrico de la Región Metropolitana, donde niñas y niños puedan acudir desde distintos puntos de la capital y el resto del país a conocer e interactuar con el legado de Alicia Vega.
“Que ahora tengan la casa donde cualquier persona pueda venir a aprender, a buscar información, a ver lo que quiere, para seguir enseñando, lo encuentro un regalo”, narra Ana María Cisternas, artista y colaboradora de años de Alicia y la Fundación.
Esta nueva etapa de la Fundación Alicia Vega le abre las puertas del mundo de Alicia al público, mostrando su trabajo durante más de 30 años en el Taller de Cine Para Niños y compartiendo su metodología y pensamiento con nuevas audiencias. Además, abre las puertas a nuevas colaboraciones con actores clave del mundo del cine, los museos, el patrimonio y la educación artística.
Marcelo Morales, director de la Cineteca Nacional destacó la relevancia de la historia del Taller: “los Talleres son una inspiración para todos quienes nos dedicamos a la investigación en cine, a valorar el cine chileno y también a formar a los nuevos públicos, las nuevas audiencias. Valorar lo audiovisual no sólo como distracción y entretenimiento, sino que también de imaginación, fomentar la creación y también de formar comunidad y vínculos con nuestro entorno y con las demás personas”.
En la inauguración, fue la misma Alicia quien ofreció el primer recorrido por la exposición, entregando detalles y recuerdos únicos de cada espacio y sus elementos. De su mano, se dio el puntapié inicial a una nueva parte en la historia de nuestra Fundación, con la fuerza de su legado.
Sobre Alicia, la directora ejecutiva de Balmaceda Arte Joven, Loreto Bravo, señaló: “es la gran artivista de Chile. Es una persona que ha generado escuela en el ámbito del cine, pero también en el corazón de lo que la educación artística puede hacer por el desarrollo social del país y para el cumplimiento de los derechos culturales y artísticos de niñas y niños”.
Andrés Millán participó en el Taller de 1993, en la población Héroes de la Concepción en Recoleta. Para él, la exposición “fue volver 30 años atrás a revivir un poquito de una semilla que germinó en mí. Siento que (Alicia) fue una maestra en mi vida y para mí es súper grato ver que su legado está súper vivo, en un país donde la educación es tan escasa, la cultura, sobre todo en los sectores más marginados de la sociedad”.